Orson Welles mintió a los oyentes transmitiendo una invasión a gran escala fingiendo que eran extraterrestres, no dejaba de narrar la novela  La guerra de los mundos.

¿Os imagináis que por primera vez descubriéramos que vamos a ser condenados por la eternidad trasmitiéndose  por medio de la radio, que descubrimos por primera vez que hay un Dios, que todo lo malo que hacemos tiene un origen? pero contando una gran verdad a la humanidad…podría ser  algo así:

Radio Edén 

Son las 2:30 PM y llega a nuestra redacción una…no sé cómo decirlo, allá va; lamento informaros de que todos vamos a ser condenados a una muerte segura y eterna, el motivo no es otro que un virus que hemos descubierto en toda naturaleza humana. Según estudios de afamados científicos han determinado que hace muchos siglos, nuestros primeros padres, los que dieron origen a nuestra especie, se contaminaron (irresponsables) con un virus mortal que se contagia genéticamente.

Pedimos calma y cautela a todo el mundo, no será posible salvarse por medio de religiones, o purificándose en sectas, es un asunto grave, es un virus mortal. no hay salvación.

Creemos que es vital tener por certeza que solo nos queda vivir está limitada vida y erguidos perecer orgullosos de nuestras obras, que lamentablemente no servirán para nada ante la certeza de una condenación.

El virus es agresivo, lo primero que hace es que pequemos ante cualquier ley de rectitud, por esa naturaleza alterada por el virus, tendemos a hacer el mal, levantarnos orgullosos de que nadie es más que uno mismo, la euforia nos domina, nos lleva a perjudicar nuestra propia sociedad y cuantas medidas legales confeccionemos.

Nos hace ser envidiosos, ladrones, asesinos, mentirosos y otras bajezas de naturaleza turbia, ella es la razón de que un ser superior que se ha descubierto creo a la humanidad, no nos acepta en esas condiciones en un lugar que los eruditos han llamado Cielo o Reino Celestial.

Somos presos en nuestra propia carne, nuestros descendientes  heredarán lo que se determina ya como Pecado. solo la perfección puede llevarnos ante ese sagrado lugar, solo limpios de espíritu podría crear un vínculo y unificación con quien nos creó. Lamentablemente nadie puede conseguir esa meta, nadie puede alcanzar la perfección, un espíritu limpio que contacte con Dios.

¡Un momento! ¡Es imposible! ¡La agitación en la redacción es brutal!

Alguien ha logrado pagar el precio de nuestro pecado original, un individuo ha vivido en santidad y se ha entregado como sacrificio ante el creador, cargando con el pecado de todos. ¡Este momento es inenarrable! ¡la emoción es contagiosa! alguien ha creado un puente entre la humanidad y Dios, las condiciones de nuestra naturaleza han cambiado queridos oyentes, estamos a salvos, podemos vivir eternamente junto a ese DIOS perfecto. Tenemos nuevas noticias…estoy algo conmocionado y confuso, parece ser que solo a través de la sangre de ese hombre sacrificado podemos permitirnos ser limpios del virus, pero las condiciones no son negociables ¡acepta a Jesús él Cristo con todo tu corazón y tu mente, viviendo en santidad, creyendo en él como salvador de tu vida o llegará la condenación eterna.

Si, sin duda es una  confusa noticia, nos deja perplejos, alguien ha muerto y resucitado por nosotros permitiéndonos ahora ser salvos de nuestro contagio y condenación.

Hemos recibido una impactante confirmación en un libro sagrado que será entregado a todos y dice…

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, más tenga vida eterna. (Juan 3:16)

Sin duda es un momento para la historia de la humanidad, el hijo de Dios se ha entregado por nosotros para la salvación de nuestras almas.

Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros. (Romanos 3:22-24)

Son momentos gloriosos, tenemos la cura de nuestra vida, ante la afirmación de nuestra culpa citado en este texto:  por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, (Romanos 3:23) 

(Romanos 5:8-11) 

8 Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros. 

9 Pues mucho más, estando ya justificados en su sangre, por él seremos salvos de la ira. 

10 Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos por su vida. 

11 Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en Dios por el Señor nuestro Jesucristo, por quien hemos recibido ahora la reconciliación. 

En esta hora solo nos queda aceptar a Jesucristo en nuestro corazón, es momento de que seamos salvos, limpios de ese mortal virus amigos míos, aceptemos a Jesucristo.

Desde la redacción nos congratulamos de esta noticia, feliz día señoras y señores, feliz salvación.